Al año le faltan pocas horas para concluir. ¿Te acuerdas de todo lo que te trajo el 2015? O mejor aún, ¿cómo aprovechaste el año para mejorar tu economía? Haz un recuento 2015 de tus ahorros y gastos para analizar el estado de tus finanzas personales. Aprende cómo en este artículo.
Recuento 2015: El año y tus finanzas
Si, el tiempo pasa como agua, pero no tiene que pasarle lo mismo a tus ahorros. Si hiciste una buena planeación, entonces la cuesta de enero no es algo que te afectará a ti y a tu familia. Pero ¿cómo sabes si lo hiciste bien y qué cosas debes aprender para el año que viene? Recuerda lo siguiente:
Analiza tus estados de cuenta
¿Tienes tus estados de cuenta guardados o en banca en línea? Analízalos y observa cuáles son tus gastos recurrentes, gastos únicos, e ingresos. Hazte las siguientes preguntas:
- ¿Hubo compras de impulso?
- ¿De qué gastos puedo prescindir?
- ¿Está creciendo o disminuyendo mi cuenta de banco?
Compras en efectivo: retiros de cajero y registro de gastos
Naturalmente no todos tus pagos los haces con tu tarjeta, muchas veces retiras efectivo del cajero. Para recordar cómo manejaste ese dinero, hay dos opciones importantes:
- En tu estado de cuenta podrás ver retiros en efectivo que hayas hecho en el año
- Si registras tus gastos en alguna aplicación móvil, también podrás ver un patrón de ahorro y gastos tal y como se muestra en tu estado de cuenta
Si no haces estos registros, considera ahora un buen momento para convertirlo en una de tus resoluciones para el año nuevo. Así podrás detectar en qué gastas tu dinero, y podrás ahorrar más de lo que esperas. ¡Haz la prueba al menos un mes para darte cuenta de las ventajas!
Ahorro del 10% de tus ingresos
¿Pudiste ahorrar al menos el 10% de tus ingresos mensuales? ¿Qué metas lograste con esos ahorros? Recuerda que además de ahorrar, puedes hacer crecer tu dinero para alcanzar metas más grandes, como el enganche de una casa o carro.
Pago de deudas
El pago de deudas no es sólo una obligación y compromiso que tienes con la persona o institución que te prestó el dinero, si no que también ayuda a tu historial crediticio, y sobre todo a tu liquidez mensual. Si ya no tienes deudas, puedes utilizar tus recursos para otras cosas como el ahorro.
Recuerda, este ejercicio es para hacer tu propio recuento 2015 en tus finanzas. Podrá no haber sido perfecto, pero te podrás dar cuenta de las cosas que puedes mejorar para el 2016. ¡Feliz año nuevo!
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