Comencemos este post con las siguientes preguntas: ¿sabes en qué has gastado exactamente en tu última quincena? ¿sabes cuáles son tus gastos fijos y variables tanto en tu hogar como en tu oficina? A muchos estas preguntas nos toman por sorpresa, y no sólo porque no tengamos esa cifra exacta en mente todo el tiempo -tenemos otras cosas de qué preocuparnos-, pero aún más importante, si no podemos responder es porque no conocemos nuestro propio comportamiento de consumo. A veces gastamos en detalles que vemos como insignificantes, o los bien conocidos “gastos hormiga”. Sin embargo, a la larga estos gastos hormigas pueden inhibir nuestros esfuerzos por crecer financieramente. Este post te guiará para que conozcas mejor tu comportamiento personal de gastos y así puedas controlar los consumos de tu hogar y oficina.

Conócete a Tí Mismo para Mejorar los Consumos de tu Hogar y Oficina

Todos los días tomamos decisiones sobre qué consumir, qué comprar y en qué invertir. Desde que estamos en la fila de la caja en el súper y nos enfrentamos a esta hilera de dulces, chocolates, y revistas – consideradas como compras de impulso-, hasta qué servicios contratar: televisión de paga, servicios on demand, suscripciones y más. Todas y cada una de esas compras representan una relación costo – oportunidad, es decir, si compras ese servicio de streaming de películas o música, ¿qué estas ganando y de qué te estás perdiendo? Esto no quiere decir que hay que estresarse por cada peso que sale de nuestras bolsas o que no podamos cumplirnos un deseo. Sólo quiere decir que para llegar a tus metas financieras con éxito, hay que tomar decisiones de compra bien informadas. Así que estos son los pasos que hay que seguir para lograrlo:

1. Identifica tus Ingresos, Gastos Fijos y Gastos Variables

Tómate unos minutos para sentarte y verdaderamente evaluar tu relación de ingresos y gastos mensuales. En una hoja de papel sencilla escribe tus ingresos mensuales, gastos fijos y variables, como lo aconseja CNN Expansión. Ahora compara esto con tus gastos fijos que podrían ser: renta, pago de hipoteca, comida y transporte; en el caso de las oficinas o negocio, esto puede incluir renta, sueldos, servicios, y más. En tus gastos variables puedes incluir un cálculo para ocio, diversión, y otros gastos que no impliquen una mensualidad fija recurrente. Te recomendamos anotar todos estos datos en tu computadora o en la aplicación de tu preferencia, así podrás tener estos cálculos siempre a la mano.

2. Analiza tu Relación Inicial de Gastos e Ingresos

Una vez que ya hayas hecho esta relación, ¿te sobra dinero para ahorrar? Según la CONDUSEF, existen 98 millones de cuentas de débito en México, de las cuáles sólo el 40% tienen un sobrante, o un ahorro. El resto se gasta la totalidad de sus ingresos mes a mes. Si estás dentro del 40% de los que si ahorran, ¡felicidades! Ya es un paso muy grande hacia el control de tus consumos. Si no, entonces es tiempo de tomar el control al conocer tu propio comportamiento de consumo.

3. Registra tus gastos e ingresos 

Quizá el reto más grande de este paso es formar el hábito de estar registrando tus gastos cada vez que pagas algo. Sin embargo, este hábito será el que defina la información que vayas recaudando a lo largo del tiempo, y que sobre la misma, puedas tomar control de tus finanzas. Te recomendamos aplicaciones como Spendee o Money Lover (está última es gratis y está disponible en español) las cuales puedes bajar a tu smartphone. Así tendrás manera cómoda de registrar tus gastos. Después, puedes ver gráficas muy visuales de cómo van creciendo o decreciendo tus gastos mensuales.

4. Analiza tu Comportamiento de Consumo

Después de un tiempo de registrar tus gastos, ahora si puedes ver en qué se está yendo tu dinero exactamente. Analiza en qué estás gastando y hazte las siguientes preguntas:

• ¿Esos gastos son por cosas que realmente quiero?
• ¿Son cosas que realmente necesito?
• ¿Ese bien o servicio trajo algo bueno a mi calidad de vida o a mis metas personales o de negocio?

Como mencionamos anteriormente, no tienes que gastar estrictamente en cosas necesarias y olvidarte de disfrutar de bienes y servicios que mejoren tu calidad y estilo de vida. Simplemente hay que priorizar las cosas en las que quieres invertir o gastar para que así puedas llegar exitosamente a tus metas.

5. Elimina los Gastos que No Traen Algo Positivo

Si las respuestas a las preguntas anteriores son negativas, entonces es tiempo de eliminar esos gastos. Estos gastos incluyen no solamente antojos como cafés, chocolates o revistas, si no también servicios de internet, o contratos de celular que no estás aprovechando al 100%. Según un cálculo estimado por la PROFECO, anualmente podemos desperdiciar hasta $28,000 pesos entre comisiones de bancos, cargos extras de contratos de telefonía y celular, suscripciones que no usamos y otras cosas. Esa cantidad la podrías usar para un fondo de inversión, el enganche de un carro o muchas otras cosas que quisieras lograr u obtener.

Después de este proceso verás que realmente estarás aprovechando tu dinero al 100% en bienes y servicios que traen algo positivo a tu vida personal y financiera. Si aún así sale alguna emergencia o pago que no alcances a cubrir por falta de liquidez, siempre puedes obtener préstamos inmediatos con Kueski. Controlar los consumos de tu hogar y oficina es mucho más fácil de lo que crees, sólo es formar el hábito de conocer tus gastos y tomar decisiones bien informadas. ¿Tienes otros tips que quieras compartir con nosotros? ¡Inclúyelos en el área de comentarios!

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