¡Dile adiós a las historias de terror en tus finanzas! Conoce cuáles son estos tipos de gastos y cómo podemos evitarlo. Este es el momento perfecto para saber qué son los gastos vampiro y fantasma. Nada más terrorífico que afectar nuestra economía de formas que no nos imaginamos.
Aunque cueste trabajo reconocerlo, los gastos innecesarios forman parte del día a día de nuestra economía, entre más los neguemos o ignoremos, más daño harán a nuestras finanzas. Es necesario que aprendamos a distinguir entre un gasto necesario y un gusto, de ahí la importancia de conocer y evitar los gastos vampiro y fantasmas.
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¿Qué es un consumo vampiro?
De acuerdo a la Condusef, los gastos vampiros, son gastos que tenemos incorporados incluso en nuestro presupuesto pero no son aprovechados al 100%. A diferencia de los gastos hormiga, que son gastos pequeños y recurrentes, los gastos vampiros son mucho más significativos, desde los 100 pesos o más.
La Condusef indica que estos gastos pueden significar hasta el 30% del ingreso mensual, por lo que es muy importante prestarles la atención que requieren ya que afectan directamente nuestra economía.
Gastos vampiros: ejemplo
Para comprender los gastos vampiros es importante que sepas que son gastos fijos, forman parte de los gastos diarios o mensuales, sin embargo, suelen pasar desapercibidos al momento de hacer nuestras cuentas y al determinar nuestro presupuesto. Algunos ejemplos de gastos vampiros son:
- Planes telefónicos de alto costo que no son necesarios.
- Mensualidades en plataformas de streaming, música, videojuegos o aplicaciones.
- Membresías a gimnasios o clubs que no se utilizan.
Los ejemplos de gastos vampiros son servicios que tenemos y que pagamos con cierta regularidad, al mes o semestrales sin darnos cuenta.
Por ejemplo, es posible que hayas contratado una plataforma de streaming y que no la veas; quizá una de música y la utilices poco; puede ser que tengas un seguro que aceptaste en el cajero y no lo has cancelado aunque te diste cuenta que ya contabas con otro igual; bajaste una aplicación de paga para utilizarla con un propósito y olvidaste que cada cierto tiempo se cobra, todos estos son gastos vampiros.
Si sacamos cuentas, estos gastos se llevan parte de nuestro ingreso, peor aún, es posible que estos servicios hayan subido su costo desde el día que los contrataste y estás pagando más de lo que pensabas sin utilizarlo.
¿Qué es el gasto fantasma?
Un gasto similar al vampiro y hormiga es el gasto fantasma. Con este gasto debes poner muchísima más atención porque es difícil detectarlo. Un gasto fantasma se refiere a esos tipos de gastos que hacemos sin darnos cuenta y que afectan nuestra cartera.
Al igual que los gastos vampiros, no son pequeños gastos como los gastos hormiga y pueden tener mucho más impacto en nuestra economía de lo que creemos, sobre todo porque no los percibimos, de ahí su nombre, ¿no?
Gasto fantasma: ejemplo
Los gastos fantasmas son difíciles de detectar , suelen pasar desapercibidos por problemas de funcionamiento. Algunos ejemplos de gastos fantasma que nos brinda la Condusef son:
- Fuga de gas.
- Fuga de agua.
- Problemas en las instalaciones de electricidad que incrementan el consumo.
- Electrodomésticos dañados que aumenten el consumo de electricidad.
¿Cómo se pueden evitar los gastos vampiros y fantasmas
Evita estas historias de terror en tus gastos, un primer paso es conocer que estos gastos existen y que forman parte de nuestra cotidianidad, por lo que es importante hacerlos visibles.
En el caso de los gastos fantasmas es complejo detectarlos, pero una forma en que puedes hacerlo es checando tus recibos, si no existen cambios en tu consumo y se ha incrementado tu pago puede ser la señal de tener alguna fuga. De igual manera es recomendable invertir en mantenimiento a tus electrodomésticos y así detectar a tiempo fallas.
Algunos consejos para evitar los gastos vampiros son:
- Revisa cuáles productos o servicios estás pagando, determina cuáles realmente no son necesarios y eliminalos.
- Si no estás asistiendo al gimnasio, detén tu suscripción por un tiempo y reactivarla cuando decidas volver o busca hacer ejercicio al aire libre.
- Comparte costos en gastos de aplicaciones, por ejemplo las de música, saldrá más accesible si dividen un plan familiar entre varias personas.
- Revisa cuáles seguros tienes contratados y cancela aquellos que te cubren servicios iguales.
Programa alarmas o recordatorios para tus fechas de pagos de servicios que te cobren de no hacerlo en tiempo.
¡No te dejes asustar por los gastos fantasmas y vampiros! Solo nos falta un poco de atención a ellos para hacerlos desaparecer. Recuerda que el dinero que te ahorres al cortar estos gastos innecesarios pueden ser el inicio de una meta más grande.
Recuerda, este es un texto informativo que contiene sugerencias. En Kueski no nos hacemos responsables por los resultados obtenidos al utilizar los productos/servicios aquí mencionados.
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