La reduflación es un término que se utiliza para describir una estrategia comercial que hacen algunas marcas de ofrecer sus artículos al mismo precio pero con menos cantidad de producto. Es posible que hasta hoy hayas presenciado esta acción pero desconocías su nombre.
Lamentablemente es una práctica que se utiliza para hacerle creer al consumidor que el costo del artículo no se ha incrementado, sin embargo, sí lo ha hecho, porque se ofrece por el mismo precio menos cantidad.
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Ejemplo de reduflación
La reduflación es una táctica que las empresas utilizan para no elevar los precios y que los consumidores sientan que pagan lo mismo por el artículo que usualmente consumen, sin embargo, la diferencia está en las cantidades. Se cree que esta práctica puede significar reducir entre un 5 a 10% menos del producto.
El término reduflación se acuñó de la unión de dos palabras: reducir e inflación. Es una estrategia que las compañías utilizan para no perder a sus clientes, lo cual sucedería si subieran los precios.
¿Te ha pasado que has comprado algo por el mismo precio pero tiene menor cantidad? De ser así entonces sabes exactamente qué es la reduflación. Un ejemplo común es la barra de pan que compras en $45 pesos, esperarías que por la inflación al ir al súper incrementará, no obstante, te encuentras que la barra sigue al mismo precio, la diferencia está en que si esa barra era de 680 gramos ahora sea de 640.
La reduflación es algo que vamos a percibir, quizá no como lo hacemos con el cambio de precio, pero al final notaremos que estamos recibiendo menos producto.
Todo artículo que encuentres en el supermercado o en la tiendita de la esquina y en la cual el producto tenga el mismo precio pero menor cantidad es un ejemplo de reduflación.
Tips para cuidarse de la reduflación
La reduflación es una forma de ocultar el alza de los precios, al reducir cantidades buscan dar la impresión al consumidor que los artículos que compran no han incrementado su costo, pero están obteniendo menos producto por el mismo precio o incluso podríamos incluir menor calidad.
¿Qué puedes hacer para evitar caer en la práctica de la reduflación? Aquí te dejamos algunos consejos:
Revisa cantidades no solo precios
Cuando vamos de compras y especialmente con productos que adquirimos frecuentemente, pocos nos fijamos en el peso, litro o volumen, siempre revisamos el costo y esa es nuestra medida para saber si lo seguimos comprando o no.
Es importante que identifiques los gramos que tienen esos artículos o los litros, para que puedas darte cuenta cuando el precio es el mismo pero la cantidad del producto es menor.
Justo por esta práctica es que surge la reduflación, porque las personas usualmente no revisan la cantidad, sino que se basan en los costos. Por eso las empresas generan una falsa creencia que sus artículos no han incrementado debido a la inflación, sino que se mantienen, porque de lo contrario los consumidores buscarán sustituir dicho producto por uno de menor costo.
Haz una lista de compras
Cuando compramos sin un orden es posible que estemos siendo víctimas de esas prácticas de las empresas. El presupuesto y orden a la hora de comprar nos hará que estás sean más organizadas y podamos identificar rápidamente si un producto es de menor calidad o tiene menos producto y su precio es el mismo.
Analiza tus tickets
La única forma de saber si esto está sucediendo con los artículos que compras con regularidad es saber qué es lo que compras, cuánto pesa o cuántos litros tiene y qué precio pagamos. Así podrás comparar con los productos que estás adquiriendo y saber si hay alguna modificación que te desfavorece.
Se trata de identificarlo para que puedas buscar otras opciones del mercado y así no tener la falsa creencia que lo que compras no ha subido de precio.
Compara precios
Es posible que siempre elijas la misma barra de pan o la lata de verduras, una buena idea es que empieces a comparar precios, marcas y cantidades. Quizá al hacer estas comparaciones te des cuenta que el artículo que generalmente adquieres no es el mejor. Estos pequeños ajustes te pueden ayudar a ahorrar.
Recuerda, podemos caer en la trampa de pensar que nuestras marcas o productos favoritos no han subido de precio y le entregamos nuestra fidelidad, hagamos zoom a la situación y veamos si el producto es el mismo en calidad y cantidad, de ser así no hay porqué cambiar pero si no lo es, será momento de voltear a ver otras opciones.
Recuerda, este es un texto informativo que contiene sugerencias. En Kueski no nos hacemos responsables por los resultados obtenidos al utilizar los productos/servicios aquí mencionados.
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